LAS VÍCTIMAS DE GAZA: EL PAPA FINGE NO VER

El Papa Francisco, el 13 de diciembre[1] , quiso mencionar por enésima vez a Ucrania. Y por enésima vez quiso precisar que es martirizada, concepto que ya había expresado el 6 de diciembre[2] y el domingo 19 al final de la oración del Ángelus[3] , mencionando también a Israel y Palestina: “Sigamos rezando por la martirizada Ucrania, veo las banderas aquí, y por el pueblo de Palestina y de Israel”. Y un concepto reiterado tres días después, el 22, mencionando de nuevo[4] también a Israel y Palestina: “No olvidemos perseverar en la oración por los que sufren a causa de las guerras en tantas partes del mundo, especialmente por las queridas poblaciones de Ucrania -la Ucrania mártir- y de Israel y Palestina”.

La combinación habría hecho que el 22 de noviembre, unas horas antes, la Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU en Ucrania hubiera publicado[5] el recuento de civiles asesinados por los rusos en 21 meses de guerra en Ucrania, que fue invadida el 24 de febrero del año pasado, y que unas horas después, el Ministerio de Sanidad de Gaza publicara a su vez[6] el recuento de civiles asesinados en Gaza en un mes y medio de guerra. Permitiendo así también una comparación inmediata y actualizada entre las víctimas civiles ucranianas y palestinas en Gaza. Con cuya comparación se concluye sin lugar a dudas que la Franja de Gaza es mucho más martirizada que la “martirizada Ucrania”.

Los numerosos vídeos y fotos de la destrucción causada por bombardeos de diversa índole, es decir, con aviones, tanques, cañones, misiles, drones y demás, hablan por sí solos. Y demuestran una realidad muy clara: a diferencia de Ucrania y sus ciudades, Gaza es un páramo reducido en gran parte a escombros. Resulta extraño, pues, que el Papa Francisco no utilice nunca para Gaza, que lo merece mucho más, el mismo adjetivo de “mártir” prodigado una y otra vez para Ucrania. Para ser exactos, al menos 17 veces en otras tantas ocasiones el año pasado y al menos 14 en otras tantas ocasiones este año. Pero la primera vez ya el 4 de febrero de 2015: “Tierra mártir”, la ucraniana.

Si Francisco hubiera dicho que Gaza también está atormentada quién sabe cuál habría sido la reacción de la Asamblea de Rabinos de Italia, ya de por sí muy dura[7] sólo porque en la audiencia privada -repito: privada- concedida el jueves 23 de noviembre a una decena de palestinos, Francisco definió la guerra que está reduciendo Gaza a escombros como “terrorismo”. Una audiencia privada exactamente igual a aquella en la que el Papa recibió en las mismas horas a un grupo de familiares israelíes de los secuestrados por Hamás en el terrible atentado terrorista del 7 de octubre.

El hecho es que el pueblo palestino ya no tiene amigos. Los lazos con Irán y la Hermandad Islámica son demasiado débiles e inciertos, mientras que en todo Oriente Próximo, Arabia Saudí, los Emiratos y Egipto tienen acuerdos siderales con Israel y, por tanto, consideran la cuestión de Gaza como un asunto interno israelí. De la comunidad islámica, por tanto, no cabe esperar ninguna ayuda diplomática, económica o militar[8] . Por eso, en la propaganda internacional, una muerte en Gaza vale muy poco, incluso comparada con una muerte en la guerra de Ucrania.

Washington, 13 de noviembre de 2023: Rashida Tlaib, senadora estadounidense de origen palestino, protesta frente al Capitolio junto a numerosos rabinos judíos estadounidenses.[9]

Veamos ahora las cifras de víctimas civiles proporcionadas por la ONU y Gaza: 1) – ONU: “Al menos 10.000 civiles han muerto -entre ellos 560 niños- y más de 18.500 han resultado heridos desde el comienzo de la invasión en febrero de 2022”; 2) – Ministerio de Sanidad de Gaza: “En Gaza han muerto 14.532 personas desde el 7 de octubre, entre ellas más de 6.000 niños y 4.000 mujeres. 7.000 personas siguen desaparecidas”.

Como puede verse, en un solo mes y medio de guerra hubo casi un 50% más de víctimas civiles palestinas que ucranianas en 11 meses. Para ser exactos, fueron 7,3 veces más que las víctimas ucranianas cosechadas por los rusos. Y los niños palestinos muertos fueron casi 11 veces más que los ucranianos. Si los rusos en Ucrania hubieran cosechado víctimas civiles al mismo ritmo que los israelíes en Gaza, habrían tenido que matar a más de 102.000 personas. Y de los niños habrían tenido que matar a más de 42.000. Sin tener en cuenta los 7.000 desaparecidos en Gaza, que si incluso “sólo” hubieran muerto la mitad, harían que la masacre de Gaza fuera aún más espantosa y la de Ucrania aún menor. Mientras tanto, a medida que han pasado más semanas desde el 7 de octubre, el número de víctimas en Gaza ha aumentado y no poco, incluidos niños e incluso bebés.

Despejemos inmediatamente el campo de una objeción que se ha convertido en casi obligatoria, sobre todo desde que el propio presidente estadounidense Joe Biden declaró[10] que no se fía de las cifras proporcionadas por el Ministerio de Sanidad de Hamás. Biden, sin embargo, fue refutado[11] por Philippe Lazzarini, comisario general de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) Por si fuera poco, Michael Spagat y Daniel Silverman, economista de la Royal Holloway University de Londres y politólogo de la Carnegie Mellon University de Pittsburg, respectivamente, especializados en el recuento de muertos en las guerras, han realizado una investigación paralela a la de la organización pacifista israelí B’Tselem, y su conclusión es muy clara: “No hay ninguna buena razón para dudar de la credibilidad de las cifras oficiales proporcionadas por Gaza”.

La nueva tragedia de Gaza es mucho mayor que las otras dos invasiones israelíes, la llamada Plomo Fundido, nombre tomado de una canción infantil y que duró del 27 de diciembre de 2008 al 18 de enero de 2009, y la llamada Margen de Protección, que duró del 8 de julio al 26 de agosto de 2014, y fue causada por el terrible asalto terrorista de Hamás a localidades israelíes con un saldo de muchos centenares de muertos, oficialmente más de 1.400[12] , y al menos 250 hombres y mujeres secuestrados como rehenes, 30 de ellos niños.

Puesta de sol en la Franja de Gaza[13]

Francamente, uno no puede entender a qué iba dirigido semejante bombardeo, que tenazmente se dirigió, masacró y secuestró casi sólo a civiles, incluidos mujeres y niños, en lugar de dirigirse únicamente contra los militares, como sucedía y sucede legítimamente en toda guerra de liberación también conocida como Resistencia. La Resistencia, como sabemos, existió hacia el final de la Segunda Guerra Mundial también en Italia, y sin embargo nunca fue culpable de crímenes contra civiles, mujeres y niños, y mucho menos de violaciones. Y hablando de Resistencia, la periodista Paola Caridi en su reciente libro “Hamas. Dalla Resistenza al regime” (De la resistencia al régimen), describe bien su parábola involutiva. La autora ha tenido a bien actualizar su libro publicado en 2009 con el título “Hamás. Qué es y qué quiere el movimiento radical palestino”.

Es imposible que Hamás no tuviera en cuenta que Israel reaccionaría furiosamente, con mucha más dureza que las dos veces anteriores, cuando invadió Gaza más en represalia por el lanzamiento de los entonces ineficaces cohetes Qassam contra las ciudades cercanas de Sderot y Askelon. Ciudades atacadas porque eran centros de población palestinos antes de que el ejército israelí deportara repentinamente a todos sus habitantes a la cercana Gaza y sus alrededores en un solo día, y luego cambiara sus nombres: Najd se convirtió en Sderot, y Al-Majdal en Askelon. Antes de la llegada de los judíos a la llamada Tierra Prometida, Askelon era una de las cinco ciudades de la Pentápolis de los filisteos, también llamada peleset por los egipcios de la época, de ahí el nombre de Palestina y Palestina. Las cinco ciudades eran Ascalón, Asdod, Ecrón, Gat y Gaza.

Es imposible que Hamás no tuviera en cuenta lo que realmente ocurrió, a saber, la destrucción casi total de Gaza y el desplazamiento de gran parte de la población. Y si no lo tuvo en cuenta, ha cometido un gravísimo error de apreciación, como para avergonzarse de salir de escena. En cualquier caso, su actuación desde el 7 de octubre hasta hoy, y previsiblemente también mañana, se parece mucho al masoquismo. ¿Quizás Hamás esperaba que Siria, Líbano, Irán, Arabia Saudí, Qatar, Egipto, Jordania y quizás incluso Irak y Turquía se movieran a su favor? ¿Con una guerra o al menos simplemente retirando embajadores para romper cualquier tipo de relación con Israel? Sólo los borrachos podrían esperar eso. Jordania y Egipto siempre han despreciado a los palestinos. En septiembre de 1970, Jordania atacó militar y sangrientamente a los refugiados palestinos de Arafat y a los colonos que se encontraban en su territorio, hasta el punto de que ese acontecimiento se recuerda como el “Septiembre Negro”[14] .

En última instancia, cháchara aparte, los palestinos han sido engañados y utilizados por todos, empezando por la Unión Soviética, que los armó primero, y terminando por Irán, que apoya a sus grupos armados, como carne de cañón de su propia política internacional, incluidas sus propias relaciones, que no son de las mejores, con Israel. Hamás es muy consciente de que su nacimiento, su crecimiento y su radicalización extremista hasta el fanatismo de base religiosa -de hecho, sus atacantes no mueren gritando “¡Viva Palestina libre!”, sino gritando “¡Alá es grande!” – han sido gradualmente favorecidos[15] por Israel para debilitar primero a Yasser Arafat y su Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y luego a la actual Autoridad Nacional Palestina (ANP).

El Estado de Israel ya está ahí, aunque sólo sea desde hace 75 años, y -nos guste o no- por tanto tiene derecho a existir. Esperar poder destruirlo es poco realista, aunque sólo sea porque ante una amenaza a su supervivencia Israel respondería con bombas atómicas como lo haría cualquier otro Estado, desde China y Rusia hasta Estados Unidos pasando por Francia e Inglaterra. El pueblo palestino es uno de los muchos pueblos desgraciadamente derrotados a lo largo de la historia.

Cifras de la diáspora palestina[16]

Negar la propia derrota y esperar que se convierta en victoria por la propia resistencia armada, además fraccionada, y/o por la intervención de los “hermanos árabes” o de los “hermanos musulmanes” es pura retórica y delirio sadomasoquista. La única manera de detener la limpieza étnica que Israel lleva a cabo por todos los medios, incluidos los violentos, y haciendo caso omiso de todas las advertencias de la ONU, la única manera de impedir la expulsión total de los palestinos del territorio del Estado de Israel y de los territorios palestinos que administra a través de las autoridades militares, es la normalización de las relaciones con los diversos Estados árabes y/o musulmanes que de hecho lo rodean.

Por supuesto, dicha normalización no devolverá a Palestina a los palestinos ya expulsados por cientos de miles y que aún sobreviven en campos de refugiados o viviendo en la diáspora. Tampoco les devolverá sus propiedades confiscadas, empezando por sus casas y tierras de cultivo y terminando por sus cuentas bancarias, ni les compensará por los numerosos abusos y otras violencias que han sufrido. Tampoco será posible nunca un Estado palestino digno de ese nombre, es decir, con sus propias fuerzas armadas, incluidas su propia fuerza aérea y su propia marina; en cambio, será más parecido a una especie de bantustán, reserva india o protectorado.

En particular, nunca será posible una solución de tipo sudafricano, la única capaz de resolver verdaderamente los problemas poniendo a judíos y palestinos en pie de igualdad, con los mismos deberes y derechos, renunciando Israel a definirse como “Estado judío”. Una patria, es decir, para todos los judíos del mundo, con derecho al “retorno”, es decir, a emigrar a Israel, pero no una patria también para los palestinos que viven allí, hoy casi 2 millones de israelíes palestinos solamente, es decir, que viven en el Estado de Israel y figuran como israelíes en sus documentos de identidad.

El enfrentamiento y los odios religiosos entre el judaísmo y el islam hacen imposible que, por ejemplo, Marwan Barghouthi, líder palestino en prisión desde 2002, llegue a ser presidente de Israel, al igual que en Sudáfrica, para poner fin a la larga y sangrienta revuelta de los africanos, en un momento dado tuvieron el valor de nombrar presidente al líder rebelde Nelson Mandela, en prisión desde hacía 27 años.

En Sudáfrica, el enfrentamiento fue político racial, pero no religioso. Sin embargo, la normalización de las relaciones entre Israel y los Estados árabes y musulmanes de Oriente Próximo pondría fin al menos a la limpieza étnica, a la interpretación israelí de conveniencia de los Acuerdos de Oslo, interpretación que ha avalado el robo continuo de tierras por parte de los colonos, ya más de 500.000 en Cisjordania, es decir, en los Territorios. La normalización de las relaciones eliminaría el Muro, que divide científicamente no sólo a los palestinos de los israelíes, sino también y sobre todo las zonas habitadas por palestinos entre sí.

El Gran Israel prometido a Abraham[17]

Por último, la normalización en cuestión pondría fin al deseo de un componente político y religioso israelí no desdeñable de volver al mítico Gran Israel. Que históricamente nunca ha existido, pero que en la Biblia (en Génesis 15:18-21) Dios lo promete a los descendientes de Abraham como el territorio que se extiende “desde el Nilo hasta el Éufrates”: es decir, un territorio que además del actual Israel incluye Cisjordania, Jordania, Líbano y casi todo Egipto y Siria.

Llegamos ahora a la “atormentada Ucrania”.

Su número mucho menor de víctimas civiles y de destrucción por bombardeos se debe a dos razones muy concretas: nos guste o no, y desde luego no está de moda ni es agradable decirlo porque enseguida se nos acusa de “putinistas” o incluso de “nietos de Putin”, Rusia intervino oficialmente en Ucrania para proteger a la población rusoparlante sometida a ocho años de abusos y en el Donbass también a ataques armados. La explicación oficial puede ser pura propaganda y, como siempre ocurre, es probable que oculte verdaderos motivos e intereses de naturaleza totalmente distinta, pero se sostiene bien.

La población rusoparlante es efectivamente minoritaria en el conjunto de Ucrania, pero según el censo de 2001 es un robusto 30% del total[18] . Y es en cambio ampliamente mayoritaria en el Donbass oriental, donde nacieron en 2014 las dos pequeñas “repúblicas populares” de Donetsk y Luhansk, para Rusia hasta la invasión NO separatistas, sino sólo autonomistas (como en Italia Alto Adigio, Valle D’Aosta, Sicilia y Cerdeña). Y es aún más mayoritaria en la república autónoma de Crimea, cuyo parlamento en 2014 decidió, también en base a un referéndum popular, volver a la Federación Rusa separándose de Ucrania. A la que Ucrania había sido “cedida” por el ucraniano Nikita Jruschov dos años después de suceder a Stalin en 1951 al frente de lo que fue la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, más conocida por sus siglas URSS.

Por lo tanto, es obvio que Rusia está tratando de evitar el mayor daño posible a la población rusoparlante, que se siente más rusa que ucraniana, incluso en el resto de Ucrania. Israel, en cambio, no tiene esos problemas en Gaza. Desde que el presidente prorruso Victor Janukovič fue sustituido por revueltas callejeras en 2014 por el magnate proeuropeo y proOTAN Petro Poroshenko, la población rusoparlante ha sido objeto de acoso y discriminación de diversa índole: desde la prohibición[19] del uso de la lengua rusa en la política y la administración pública hasta la drástica reducción de su enseñanza en las escuelas, pasando por la prohibición de importar libros escritos en ruso o el asedio del Donbass oriental por milicias principalmente privadas. Milicias privadas como la infame Azov, la menos conocida Sector Pravyj (en italiano, Settore Destro), el Batallón 206 y otras creadas por Poroshenko y financiadas[20] principalmente por otro magnate: Ihor Kolomoisky, que también es el financiero de Zelensky y su editor televisivo, así como el propietario del primer banco de Ucrania, de aerolíneas, canales de televisión, industrias metalúrgicas y el equipo de fútbol Dnipro FC.

Por su parte, Poroshenko[21] , además de ser apodado El Rey del Chocolate por la montaña de dinero que gana produciendo dulces, posee varias fábricas de automóviles, autobuses, vehículos blindados y armas[22] , también es propietario del astillero Lenins’ka Kuznja, del canal de televisión Kanal 5 y de la revista Korrespondent. En total, se calcula que la guerra civil ha causado más de 40.000 muertos, la gran mayoría en la población rusoparlante de Donetsk, en Luhansk.

Abril de 2014: ciudadanos de origen ruso protestan en Luhansk contra las leyes de ucranianización[23]

La motivación oficial de tener que defender a la minoría rusoparlante, sin embargo, corre el riesgo de ser utilizada por Rusia para invadir otros Estados vecinos también habitados por minorías rusoparlantes no desdeñables. que se sienten rusos tout court. En Moldavia, por ejemplo, está Transnistria, un pequeño Estado rusoparlante independiente de facto, pero, al igual que las dos pequeñas “repúblicas populares” ucranianas de Donetsk y Luhansk, no reconocido por los Estados miembros de la ONU porque lo consideran parte de Moldavia.

La otra razón de la escasez de víctimas civiles en Ucrania -siempre demasiadas en cualquier guerra de todos modos- es que, contrariamente a lo que se ha hecho creer desde antes de la invasión, Rusia nunca pretendió conquistar toda Ucrania. Esta afirmación queda DEMOSTRADA por las cifras publicadas en su momento por los propios Estados Unidos. Rusia de hecho invadió Ucrania, que en el censo de hace cinco años (2018) tenía una población de 42.322.028 habitantes, con un ejército de más o menos 160.000 hombres, aumentado a 300.000 y con otros 200.000 listos para una “segunda invasión”, que sin embargo no se produjo, si acaso hubo un reemplazo a mano de las pérdidas[24] .

Es habitual decir que Rusia invadió con un ejército inadecuado porque contaba con un golpe de Estado de las fuerzas armadas, cuya cúpula había sido sobornada descaradamente, es decir, comprada con mucho dinero. Un golpe que habría cambiado el gobierno de Kiev. Pero no hay ninguna prueba de esta afirmación, ni ninguna evidencia que la apoye. Tengamos en cuenta que Zelensky destituyó no sólo a toda una serie de importantes dirigentes civiles por corrupción, sino también a toda una serie de oficiales militares de alto rango. Ninguno de los cuales ha sido acusado de venderse a los rusos para dar un golpe de Estado.

En 2010 se publicó el libro “Labyrinth Iran – Hypotheses of Peace and War”[25] , en el que se esbozaban los nueve escenarios presentados a la Casa Blanca cuando el presidente Obama era presidente por seis expertos del think-tank Saban Center for Middle East Policy[26] uno de los mejores de Estados Unidos, para salir de una vez por todas del laberinto de la política con Irán. El Centro Saban es una rama del prestigioso think tank Brookings Institution. Los escenarios planteados por los seis expertos iban desde una invasión militar hasta la firma de un tratado de paz sólido y duradero, desde un golpe de Estado clásico hasta el sometimiento de las minorías para desintegrar el país y derribar su régimen político.

Los seis autores del informe del Centro Saban a la Casa Blanca han ocupado puestos de responsabilidad, unos en el Departamento de Estado, otros en el Consejo de Seguridad Nacional, otros en la CIA y en las acciones de EE.UU. en Irak, Corea, Pakistán y Afganistán, que famosamente desembocaron en guerras y similares. Tampoco hay un antiguo embajador en Israel que se convirtiera en asesor personal del presidente Clinton, como Martin Yndik, ni un miembro del personal del gabinete del presidente Obama, como Suzanne Maloney.

Los seis expertos en cuestión también han aprendido de sus experiencias en Irak y Afganistán, que calificaron de fracasos por no contar con el número de hombres necesario. Los seis habían advertido a Obama de que para invadir Irán o cualquier otro país y conseguir de algún modo “pacificarlo”, es decir, mantenerlo bajo control, se necesitaba al menos un hombre de uniforme por cada 20 habitantes: así, una eventual invasión de Irán, un país con casi 80 millones de habitantes en aquel momento, necesitaría un ejército de casi 4 millones de hombres, adecuadamente armados. Lo que significa que para invadir Ucrania con la intención de conquistarla y mantenerla bajo control se necesitaría un ejército de más de 2 millones de soldados: es decir, un ejército 12,5 veces mayor que aquel con el que Rusia llevó a cabo la invasión y 6,6 veces mayor que el que se hizo gradualmente con el poder tras la invasión.

POST SCRIPTUM – Todo esto, en mi opinión, demuestra que la afirmación de Biden[27] de que si Rusia gana “después de Ucrania puede no parar y amenazar a nuestros aliados de la OTAN”, empezando por Polonia, carece de base real.

ITA038

[1] https://www.vaticannews.va/it/papa/news/2023-12/papa-francesco-udienza-generale-appello-pace-terrasanta-ucraina.html

[2] https://www.agensir.it/quotidiano/2023/12/6/polonia-domenica-si-celebra-la-giornata-della-preghiera-e-dellaiuto-materiale-per-la-chiesa-dellest-il-ringraziamento-del-papa/

[3] https://www.google.it/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=&ved=2ahUKEwjYmvbrvP6CAxXjU6QEHczGC4EQFnoECA0QAw&url=https%3A%2F%2Fpress.vatican.va%2Fcontent%2Fsalastampa%2Fit%2Fbollettino%2Fpubblico%2F2023%2F11%2F19%2F0810%2F01764.html%23%3A~%3Atext%3DPrego%2520perch%25C3%25A9%2520non%2520si%2520scoraggi%2CCi%2520vuole%2520buona%2520volont%25C3%25A0.&usg=AOvVaw22d_F6BBG1KJ7pnFkVe5z5&opi=89978449

[4] https://www.agi.it/estero/news/2023-11-22/papa-incontra-familiari-ostaggi-israeliani-palestinesi-24091158/#:~:text=AGI%20%2D%20%22Let’s%20not%20forget%20to%20persist,%20at%20the%20end%20of%27General%20Hearing

[5] https://www.ansa.it/amp/sito/notizie/mondo/2023/11/21/onu-almeno-10mila-civili-morti-in-ucraina-da-inizio-guerra_29b71bb0-e4f9-45d5-bc42-ab3c93e24787.html

[6] https://www.lapresse.it/ultima-ora/2023/11/22/medioriente-autorita-gaza-oltre-14-500-morti-da-inizio-guerra/#:~:text=Milano%2C%2022%20nov.,las%20personas%20desaparecidas%20son%20alrededor%207.000

[7] https://www.avvenire.it/chiesa/pagine/parolin-nella-guerra-in-medio-oriente-il-papa-vicino-alle-sofferenze-di-tutti

[8] https://theglobalpitch.eu/2021/06/06/how-egypt-and-israel-are-destroying-palestine/ ; https://theglobalpitch.eu/2022/06/10/palestine-where-every-day-cain-returns/ ; https://theglobalpitch.eu/2023/11/08/netanyahu-and-the-dream-of-the-big-bomb/

[9] https://www.today.it/video/usa-rashida-tlaib-con-i-rabbini-al-campidoglio-stop-guerra-a-gaza-82yiw.askanews.html

[10] https://www.ansa.it/sito/notizie/mondo/mediooriente/2023/10/25/biden-non-mi-fido-del-numero-dei-morti-fornito-dai-palestinesi_9f34098f-ca3e-4ff1-92bd-33a3db2ec221.html

[11] https://www.ansa.it/sito/notizie/mondo/2023/10/27/capo-unrwa-replica-a-biden-cifre-su-morti-a-gaza-credibili_e15cd84f-92d9-4ef1-a808-80f1f85ddee0.html